Una boda de ensueño puede ser el título de la boda de Lara y Alberto.
Se casaron en la finca privada de la familia de la novia, un paraíso en un pueblecito cerca de Sevilla, rodeado de naranjos, palmeras y aguacateros.
Mediante la decoración, música, luz y espectáculos conseguimos que los invitados fueran destapando las sorpresas que habíamos preparado.
La boda comenzaba con una ceremonia emotiva al aire libre, pasando por un cóctel con varias actuaciones musicales; flamenco en vivo y un grupo de jazz. Al finalizar el cóctel los invitados pasaron a la cena que organizamos en una mágica carpa cristal servida por el cátering del Estrella Michelín Dani Garcia.
Al finalizar la cena, dimos la bienvenida a un séquito de bailarines, zancudos y malabaristas que al ritmo de una batucada en directo guiaban a los invitados por los jardines donde disfrutaron de un espectáculo de fuegos arficiales previo a la fiesta tropical que duró hasta altas horas de la mañana.
4 diciembre, 2017
