La boda de Blanca y Javier comenzó en la Iglesia de la Real Colegiata de San Isidro, en pleno centro de Madrid, una Iglesia espectacular que decoramos con guirnaldas y cestones de paniculata.
El Soto de Mónico fue el lugar escogido para la celebración, con su increíble puesta de sol, sus salones con casi vista 360º a los preciosos jardines y alrededores del río Henares. Tras la ceremonia, a la llegada al Soto de Mónico, Blanca sorprendió a Javier con un grupo de flamenco ya que él es un apasionado de los cantaores. La cena se compuso por 16 mesas redondas y tres mesas imperiales, y la espectacular mesa presidencial que decoramos junto con @sibilinadeco con una gran estructura de madera e increíbles enredaderas verdes y velitas colgando.
El baile fue un momento muy especial para Blanca y Javier, ya que la novia abrió el baile con su hermano pequeño con la canción de Por ti volaré, de Andrea Bocceli, los invitados se fueron uniendo poco a poco a la gran pista de baile rosa decorada mediante estructuras trust y la música de @heymmickeyevents hasta altas horas de la mañana.
Mención especial al acogedor chill out que decoramos con grandes bancadas blancas de madera, almohadones en tonalidades rosas y una guirnalda de lucecitas colgando.
Gracias al equipo de @aortizphoto y a @instantesfotografos.
19 junio, 2018